14 de octubre de 2015

El valor del amor

Conocerse a uno mismo es una de las aventuras más fascinantes a la que uno se enfrenta en la vida. No aceptar etiquetas, ni condenas porque eso es lo que haremos con los demás. Reconocerse como uno o una de las grandes. Con autoridad, con poder, con potencial, con enormes valores que aportar al mundo. ¿En qué consiste ese potencial? Muchas veces, eso de lo que creemos carecer es de lo que más portamos pero que no hemos desarrollado. Y adoptamos pseudovalores o personajes que no nos hacen justicia. 

En el mercado de valores no se aceptan algunos de los realmente auténticos porque resultan amenazantes o no se atreven a admirarlos. Pero están ahí. Reconocerlos como valores y dones que nos ha entregado la vida para el bien es el primer paso. Nuestro amor, nuestra grandeza,