“Es impresionante el tema de
Palestina. ¿No te parece?”. ”A mí Quevedo me parece mucho mejor escritor que
Góngora. ¿Y a ti?”. “Me indigna lo que está pasando en el Sáhara”. Asintiendo,
nos interrogamos para nuestros adentros: ¿Qué pasa en Palestina? ¿Tendrá algo
que ver con Quevedo? Que el Sáhara sea un desierto, no sabía que le afectaba
tanto…
No tenemos ni idea. Sin embargo,
a nuestro interlocutor o interlocutora no le preguntamos nada por miedo o vergüenza
de sentirnos tontos, ignorantes a sus ojos y a los de todos los que estén cerca.
Pensamos que tenemos que saber el contenido sobre cada uno de los temas y
además tomar un posicionamiento respecto a él. En los casos que tienen que ver
con dudas de cultura general, San Google o Santa Wikipedia ayudan, pero