30 de agosto de 2013

Lo que podemos hacer

De los creadores de “La gente es lo peor” y “El mundo está hecho un asco” llega... “¡Todos hablan pero nadie hace nada!”

En cualquiera de las tres afirmaciones, nos vemos como marcianos, abservando desde nuestro planeta lo que pasa en la Tierra, como si nosotros no tuviéramos nada que ver. Para tener esa actitud sólo hay dos opciones: o los demás son peor que nosotros o nosotros somos mejor que los demás. En cualquier caso, hacemos lo mismo: quejarnos y criticar, cosa que deja una sensación de pesimismo en el ambiente y de culpabilización al personal. 

El gobierno nos hace la vida imposible, las multinacionales nos quitan el trabajo, los bancos nos rematan, las leyes están acabando con el bienestar

24 de agosto de 2013

¡A descansar!

El descanso es a la actividad lo que el silencio al sonido. No podríamos estar escuchando cantos de pájaros, música, rumor de olas, risas, conversaciones, etc. a todas horas por muy agradable que fuera todo eso porque nos volveríamos locos. Es como los que oyen voces; ya no sabríamos si están dentro o fuera de nosotros. El sonido continuo puede perturbar a cualquiera, porque agota.

Lo mismo ocurre con la actividad. Está claro que no hemos venido a este mundo a tumbarnos a la bartola, pero de ahí a no parar, hay un trecho. Sin embargo, a muchas personas les cuesta horrores dejarse mecer por la quietud y reparar nuestra mente y nuestro cuerpo. Es cierto que hay otras

21 de agosto de 2013

Convencer: una batalla perdida

Hoy en día, un debate, sea en el medio que sea e independientemente del tema que se trate, termina por definirse como un cúmulo de desentendimiento, de falta de acuerdo, donde cada uno se enroca más en su posición. Eso, cuando no acaban por levantar la voz o incluso faltarse el respeto.

Tal vez, cuando estuvo en boga, allá por el imperio griego, tenía su sentido. En realidad, desde una posición donde se apuesta por la cultura, el desarrollo y por los valores humanos, la oratoria era una fuente de inspiración, aprendizaje y admiración para los presentes, y una fuente de superación, búsqueda de empatía, desarrollo intelectual, para los

18 de agosto de 2013

Cuando se acaba lo bueno...

Los niños saben perfectamente cuándo están viviendo algo bueno y lo disfrutan entregándose a ello sin dificultad. Eso sí, cuando se acaba, se puede crear una sensación de vacío que se percibe claramente como una injusticia de tal manera que se rebelan llorando y pataleando, ya sea en silencio o a grito pelado. En esos momentos, somos los adultos los que estamos para acoger su malestar y ofrecer el consuelo necesario, que suele pasar por asegurar que esa maravillosa vivencia se repetirá en breve y multiplicada. Por supuesto, si somos consecuentes haremos que se produzca.

En el caso de los adultos, cuando vivimos momentos maravillosos, donde nos sentimos plenos tendemos a conformarnos con haberlo experimentado y nos damos por satisfechos dejando un poso de tristeza

15 de agosto de 2013

Porque es mi voluntad

Pedir un voluntario significa que se busca a alguien que se ofrezca, que tenga buena voluntad. Hoy en día, cuando piden un voluntario para lo que sea, aunque no lo sepamos, suena a marrón. Nuestras células han registrado innumerables ocasiones donde era así, por lo que el mal recuerdo nos dificulta ofrecer esa voluntad al solicitante.

La voluntad es la facultad de hacer o no hacer una cosa. Y la voluntad también puede ser buena o mala, es decir, que podemos tener un buen o mal propósito o disposición.

La voluntad de cada ser humano es lo que forja su destino. Después puede justificarse, buscar excusas, negarlo,… pero eso no cambia que quien tomó la decisión de entregarse a una cosa en lugar de a otra fue la propia

13 de agosto de 2013

Lenguaje universal

Nos afanamos en entender cuando somos pequeños, y ya de mayores, en hacernos entender. Probamos en nuestro idioma. Aprendemos las reglas gramaticales, morfosintácticas y vamos llenándonos de un amplio vocabulario, cada vez más extenso. Utilizamos figuras como símiles y metáforas con el objetivo de construir conceptos fieles a la realidad, o que se acerquen lo más posible para explicarnos con palabras.

Hacernos comprender no significa que hayamos superado el primer paso, el de comprender el mundo que nos rodea. Puede que sí y puede que no. Sin embargo, al necesitar sentirnos que pertenecemos a un lugar común

9 de agosto de 2013

Luchar por la Vida

A veces hacemos cuentas y no nos cuadran. Cuando 1+1 no son 2, nos entra una especie de frustración, de sensación de injusticia matemática. ¿Acaso las ciencias no eran exactas? La vida entonces, ¿no forma parte de esas ciencias? Al parecer no. Si A=B y A=C, no ocurre que B=C. Ni con decimales conseguimos lo que nuestro cerebro nos dice que es lo coherente.

Traduciendo estos números a letras, a palabras o a actos, entonces si luchamos por algo, no significa que lo consigamos -ni que no lo consigamos-. Existen variables que no están a nuestro alcance, pero eso no nos roba ni un ápice de esfuerzo, de tesón.

No importa lo que consigamos sino lo que luchemos. Se puede luchar hasta el final o hasta derrotarnos y quedarnos en el camino. Es nuestra elección. Es como en los libros de aventuras: admiramos y nos

8 de agosto de 2013

Lo desconocido... ¡uhuhuh!

Como si esto fuera un serial, retomamos la idea de la “aventura” del capítulo de ayer. Si alguien no lo vio (o leyó, mejor dicho) puede unirse al viaje igualmente. La vida es un tren en marcha, o una bici. Lo bueno es que cada uno puede elegir el medio de transporte y cambiar  de uno a otro. De hecho, a veces empezamos a pie, luego nos subimos a un cohete y acabamos en piragua.

Cuando la aventura ha comenzado ya no hay vuelta de hoja. Podríamos decidir no continuar, pero una vez que se ha tomado la decisión, renegar de ella está muy feo. Es de cobarde, gallina, capitán de las sardinas.

Teníamos claro –por el capítulo de ayer- a dónde nos dirigíamos, y por eso creemos que hemos llegado al destino si se trata de un lugar físico. Pero el destino no es un país o una relación. Es lo que nace a partir de ahí, es el

7 de agosto de 2013

La llamada de la selva

Hay un día donde escuchamos algo que va más allá de la bocina de un coche o la risa de un grupo de amigos. Es un sonido por dentro. Un sonido que nos agarra. Al principio es como una caricia o una ligera palmada y poco a poco nos va cogiendo más firmemente hasta que se acaba aferrando a nuestras entrañas. Y aunque nos entre miedo hasta sentirnos paralizados, es una maravillosa sensación si decidimos ser coherentes con ella y seguirla.

Se parece mucho a la sensación de enamorarnos, sobre todo cuando mantiene su pureza, su fuerza, su determinación. Así que después de toda esta introducción, del redoble de tambor podemos pasar a presentar a…