15 de agosto de 2013

Porque es mi voluntad

Pedir un voluntario significa que se busca a alguien que se ofrezca, que tenga buena voluntad. Hoy en día, cuando piden un voluntario para lo que sea, aunque no lo sepamos, suena a marrón. Nuestras células han registrado innumerables ocasiones donde era así, por lo que el mal recuerdo nos dificulta ofrecer esa voluntad al solicitante.

La voluntad es la facultad de hacer o no hacer una cosa. Y la voluntad también puede ser buena o mala, es decir, que podemos tener un buen o mal propósito o disposición.

La voluntad de cada ser humano es lo que forja su destino. Después puede justificarse, buscar excusas, negarlo,… pero eso no cambia que quien tomó la decisión de entregarse a una cosa en lugar de a otra fue la propia
persona.

En un conflicto, independientemente de su carácter, si uno tiene la voluntad de no venderse, de no traicionar aquello en lo que cree, todo lo que es sagrado, no lo hará. A través de la violencia se pueden cometer innumerables atrocidades, y de hecho, se cometen. Y nos pueden incluso quitar la vida por la violencia, pero la voluntad de vivir y defender la vida nadie nos la puede arrebatar. Rebelarse a cualquier imposición es lo pertinente. Desobedecer a la autoridad que no sea la nuestra nos permitirá encaminarnos a nuestro destino.

Para hacer uso de la propia voluntad existe un paso previo: ser libres. De lo contrario, existirá una voluntad pero no será la nuestra. Nuestra actitud se definirá por la obediencia, la obligación, el sacrificio generando emociones negativas a nosotros mismos y a los demás. Esta situación es similar a la que comunicaba el insigne José Luis Sampedro hablando de la libertad de expresión, ya que como bien advertía, esta libertad no es posible de una manera sana si no existe la libertad de pensamiento. Ejercer ese derecho responde a la auténtica libertad.

La vida nos otorga el libre albedrío y la conciencia para no someternos y tomar decisiones que construyan y salven.

En la voluntad no hay escala de grises ni relativismo: lo que es, es. O se quiere o no se quiere, o se ama o no se ama. Eso de “a mí ya me gustaría, pero claro, es muy difícil, no sé… mejor mañana ¿no?” es una excusa lamentable.

Mientras no hagamos uso de esa voluntad la vida está en peligro, empezando por la nuestra. No sólo se pone en peligro sino que sentirnos dignos de admiración está un tanto comprometido. Y es la pescadilla que se muerde la cola, porque si no nos sentimos hombres y mujeres “diez”, o no lo suficientemente fuertes, valientes, grandes, amorosos, etc. jamás reuniremos fuerzas para tomar decisiones que lo salven todo.

La voluntad, además, tiene otra característica y es su duración en el tiempo. Jamás podremos abandonar porque no debemos hacerlo. O esa voluntad es imparable y para siempre o no habremos hecho nada; mucho esfuerzo para que se quede en agua de borrajas.

En definitiva, la voluntad responde a una fuerza imparable que está guiada por la fuerza del alma. En esa voluntad somos nosotros quienes decidimos lo que sí y lo que no. Es la versión adulta de “porque me da la gana y porque no me da la gana”. Con la voluntad hemos alcanzado la madurez porque está acompañado de una conciencia y unos recursos que van dirigidos a defender, a proteger y a salvar la vida.

Nadie, absolutamente nadie puede decirnos quiénes somos y quiénes no somos, cuál es nuestro valor y cuál no, ni qué debemos hacer y qué no. Y mucho menos pueden impedirnos llegar a donde nosotros decidamos y la vida nos lleve. La voluntad, en muchos casos, nos lleva más lejos de lo que nunca hubiéramos imaginado. Así que ¡disfrutemos del viaje!

3 comentarios:

  1. Porque es mi voluntad ,porque puedo,porque quiero ,mi jefe la Vida y mi conciencia,mi trabajo estar a su servicio para siempre,es un honor y un regalo poder estar aquí ofreciendo todo lo que se me ha regalado,me siento pleno,me amo y puedo amar.gracias,gracias Maite por tu sabiduría y tu talento para transmitirla

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  2. Nuestra voluntad fuerte,nos permite conseguir todo lo posible y como minimo luchar por ello hasta el final.Hoy en dia nos lo ponen dificil con tanto" borregismo."Pienso desde mi libertad, que no renuncio a mi voluntad de cambiar el mundo y hacerlo mejor.
    Arturo

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  3. Me presento voluntario para tener autoridad suficiente como para ser mi propia autoridad y decidir mi destino.Gracias Maite por tu articulo,esta pleno de enseñanza y saber lo que es correcto.Tu si que sabes.
    Asdrubal

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